Siempre que mis zapatos gastados me llevan a Puerto Plata, tengo una cita con Demetrio y el Puente de la Guinea.Creo que aun gateaba, cuando mi padre me enseño que allí, puerta del camino principal de entrada a la ciudad a principios del siglo XX, un fatídico 2 de enero de 1906 el destacado General de la época del Conchoprimo Dominicano, Demetrio Rodríguez se encontró con dos balas fraticidas que le perforaron y quemaron su pecho de guerrero indomable.
Ese día, mientras su sangre abonaba la tierra, se le congelaba la mirada y se le terminaba el porvenir, al perder la vida su leyenda nacía.
Mientras me siento en un extremo del Puente, la imaginación creadora me sirve como túnel del tiempo que me permite viajar al momento de la cita de Demetrio con la muerte. Entonces, cierro los ojos para verlo en su brioso caballo avanzando sable en mano, con su habitual desprecio por la vida y sin titubear, como siempre había sido desde aquel 1899 que al país quedarse sin la mano férrea de Lilis, el, al igual que cientos de jóvenes mas, siguieron el camino trazado por el General Cirilo de los Santos y sus famosos "Carpinteros" e impusieron la fuerza del valor infinito y del honor sin precio en epopeyas lamentablemente sin futuro y contiendas sin esperanzas ni resoluciones definitivas.
Siempre me ha parecido heroico y conmovedor el personaje de Demetrio.
Su padre,Don Bernardo Rodríguez vislumbro en el hijo un placer infinito por el ruido de los tiros y el olor sulfuroso de la pólvora y tratando de cambiarle el destino, bajo el pretexto de alejarlo de los peligros de la Dictadura de Lilis y la necesidad de un gerente para las tierras y propiedades familiares, lo embarco para Alemania para que estudiara Economía.
Pero Demetrio, como muchos de nosotros, estaba marcado por el destino: Su corazón liniero, la genética de los tiros, los caballos, el merengue y las hembras dominicanas de la línea, eran los ingredientes esenciales de su naturaleza y no podía negarla. En Europa, rápidamente entendió que los libros de economía, el frió, las europeas en general y las alemanas en particular no encajaban con su ser.
Lo cual para mi, era la única decisión posible, pues acaso, pregunto yo, se puede negar lo que uno es?
Embarco en la primera goleta y regreso para vivir como le dictaba su naturaleza y para morir como estaba escrito, en medio del tronar de las balas en el frenesí paroxístico de la guerra. Al caer herido de muerte y mientras la hemorragia le consumía la vida, dicen que una sonrisa de satisfacción lleno su rostro. Su amigo y coterráneo Candelario Jiménez le disputo su cadáver palmo a palmo al enemigo y lo llevo a marcha forzada primero y dentro de un serón después hasta su hogar en Juan Gómez, Guayubin donde fue sepultado en un ataúd de tablas, entre los lamentos, quejidos y carajeos de sus amores, sus ahijados, sus compadres, sus soldados y su pueblo liniero.
En el centenario de su muerte, se le rindieron homenajes en Juan Gómez donde aun permanece sepultado.
Miguel_344
5 comentarios:
este señor es un buen patriota personas hacy esque deveriaa estar llena la republica dominicana felisidades patriotas dominicanos....................................................... att: paulina mi msn es la_exotonic@hotmail.com
Demetrio Rodriguez eS mi visa-abuelo!!!! :D Soii Hillary valentina Rodriguez de Grullon !!!
Este gran hombre, a quien he adorado toda mi vida, por referencia de mi padre, Julian Rodriguez. es mi abuelo,por el cual llevo su nombre. gracias a ustedes por sus informaciones.
el gral lencio roca mi abuelo emparentado con el gral demetrio rodriguez el cual era primo hermano de mi abuela amelia rodriguez su esposa murio en un combate en los alrededores de punta garza san pedro de macorix en enero de 1904 luchando al lado del gral demetrio rodriguez contra las fuerzas gobiernista de morales languasco.
Miguel A Roca Rodriguez
cel 809 723 8812
Siento un profundo orgullo de ser biznieta del General Demetrio Rodriguez, ilustre, gallardo, valiente y heroico personaje de nuestra historia Dominicana. Ciertamente un ejemplo a seguir, siempre demostro un total desinteres por el poder personal y lucho por el bien comun de sus conciudadanos. Edith Housni, New York 28 de diciembre del 2011.
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